sábado, 14 de noviembre de 2015

La Orbea 1/2 Carrera que pudo ser brillante. Restauración de bicicleta (colección)

Últimamente en nuestro taller no dejan de entrar bicicletas de una de las marcas más famosas de España. No es de extrañar que quien tiene una Orbea de los años '50 tiene una especial conexión con esta particular cooperativa. Decimos particular porque no todo el mundo sabe que en sus orígenes, allá por el  año 1840 se dedicaba a la fabricación de armas y no fue hasta el año 1920 cuando se dedicaron a fabricar estas famosas bicicletas.
Tras esta pequeña introducción, viene nuestra particular historia de una de las mejores bicicletas que han salido de la fabrica del País Vasco, la Orbea 1/2 Carrera. Esta fue un regalo de unos vecinos, se trata de una bicicleta muy alta y su anterior dueña no podía usarla, así que gustosos aceptamos este regalo que para nosotros fue tan especial.



No tenemos fotos de su estado inicial pero, sí del de después de limpiar el cuadro de polvo y roña debido al tiempo que pasó en un almacén guardada:



Después de limpiar el cuadro nos dimos cuenta que éste había sido pintado a brocha en un llamativo color azulón



El óxido avanzaba a paso ligero sobre las piezas que un día fueron cromadas, hasta casi llegar a borrar la inscripción del manillar.






A pesar de su mejorable estado, mecánicamente la bicicleta funcionaba muy bien. Es muy ligera y frena eficazmente gracias a sus viejos frenos de cable. Nos pensamos una y mil veces qué hacer con ella. Podíamos haber hecho una restauración completa con pintura nueva y nuevos adhesivos; llevar a cromar las partes metálicas y añadirle algunos extras de la época. Pero, entonces hubiese perdido la esencia de la bicicleta que nos regalaron, todas esas pinceladas de azul que, en cierta manera, le daban el carácter viejuno que deben de tener estas bonitas bicicletas.
Por tanto, decidimos mantener su esencia, manteniendo su aspecto actual para poder usarla como bicicleta de uso diario, sin miedo a que se roce o se deteriore por su uso:




Eso sí, añadiéndole sus adhesivos originales. Cómo iba nadie a saber que es una Orbea si no la identificamos?


A este timbre le tenemos especial cariño, su sonido es muy dulce y su estado es buenísimo!


Matamos el óxido puliendo las piezas y aislándolo con un barniz incoloro.







Añadimos un viejo Rinder Mod.7 con un soporte de potencia, el equipo de iluminación lo cierra esta bonita dinamo RADIOS de origen francés.




No podíamos permitir que su aspecto descuidado se echara a perder por unas fundas de freno nuevas, de algún color, así que decidimos envejecer unas fundas metálicas:


También añadimos unas alforjas algo desgastadas, las tomamos prestadas de otra de nuestras bicicletas, aunque por poco tiempo!





Hasta que encontremos un sillín de cuero de Orbea, nos tendremos que apañar con uno de nuestra tienda online Bicicletes Restore-It! , el cuero natural de 5mm GYES y el acabado cromado no desentonan para nada con la bolsa portaherramientas, también de nuestra tienda online.



Y así se quedó por un tiempo pero, la rutina diaria hizo que tuviéramos que "actualizar" nuestra Orbea 1/2 carrera a las necesidades que nos surgían, entre ellas, ejercer de tíos es nuestra preferida.




La nueva sillita porta niños de estilo retro era lo que necesitábamos para llevar a nuestros sobrinos del cole a casa:


Tuvimos que suplementarla con un taco de madera para que encajara en el porta equipajes original y no se dañara nada. El aspecto es algo tosco y rudimentario, pero firme y seguro. Ademas, esta sillita esta homologada y cumple con la normativa vigente de seguridad.


Como podéis ver las bicicletas clásicas son perfectamente válidas para el día a día urbano.

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